miércoles, 5 de diciembre de 2007

CONDENAMOS LA CRUELDAD

Las imágenes son desgarradoras y las palabras pocas para describir la barbarie y trato inhumano a las que están sometidos los colombianos secuestrados por las FARC. Las pruebas de supervivencia incautadas por el Ejército Nacional, muestra la realidad de los que engañosamente en Europa y el mundo se hacen llamar “ejercito del pueblo”

El país enmudeció al ver el horror que viven los secuestrados de esta guerra absurda. La mirada triste de Ingrid Betancourt represento el grito desesperado de los colombianos que estamos cansados con este drama, represento, además, la crueldad y maltrato de la guerrilla de las FARC que cada día demuestran que no desean la paz de nuestro país. Esa mirada en el vació muestra la necesidad de unirnos con una sola consigna: Rechazar el secuestro y exigir la liberación incondicional de todos los colombianos secuestrados por las organizaciones de narcoterroristas.

Estas imágenes nos permiten llegar a una reflexión sobre el conflicto y el acuerdo humanitario. Pensar, hoy por hoy, que el acuerdo humanitario es una herramienta útil, de cara a iniciar un proceso de reconciliación y paz en nuestro país, es un gran error si queremos llegar a la tan anhelada paz.
La búsqueda de procesos claros y duraderos no puede ni debe sustentarse en decisiones, que por mas deseadas, son dañinas para el futuro. El acuerdo humanitario permite justificar las formas ilegales de lucha empeladas por la guerrilla y convierte al secuestro en un mecanismo de injerencia política que atenta contra la dignidad, vida y honra de las personas.
¿Por qué argumentamos la anterior afirmación? Por una sencilla razón y es, que si Colombia acepta en este momento el acuerdo humanitario permitiría perpetuar el conflicto y justificar el secuestro de colombianos inocentes como forma de lucha y presión política.

¿Qué pasaría en 1 año si aceptamos el acuerdo humanitario? el panorama seria claro: de aceptarse el acuerdo, los secuestrados estarían libres, pero el conflicto no acabaría. Al no terminarse nuestro conflicto, el Ejército seguirá cumpliendo su deber constitucional de combatir toda fuerza insurgente en el Estado colombiano, lo que significaría capturar y/o dar de baja a los terroristas. Si esto es así, los guerrilleros seguirán secuestrando, torturando, asesinando y atacando a la población civil, a sabiendas, que tendrán en los secuestrados, un factor de presión y negociación frente al gobierno, por lo que cada vez pedirán que se llegue a un acuerdo humanitario. Esta realidad será repetitiva y contínua hasta que en Colombia no podamos llegar a una solución definitiva que ponga punto final a la guerra que vivimos.

Queremos que todos los colombianos de bien regresen a sus casas, estén con sus familias y tengan una vida digna. Lo que no podemos aceptar es salidas de corto plazo que no busquen ponerle punto final al drama colombiano sino que alargue la agonía y justifique el secuestro como forma de presión política y social. “Es preferible unos años de agonía que toda una vida de dolor” por lo que el acuerdo humanitario sería una alternativa viable siempre y cuando supiéramos que el conflicto no seguirá, de lo contrario traería mas perjuicios que beneficios para el país.

De esta forma reiteramos nuestro rechazo a las atrocidades de las FARC, que nos hacen recordar el holocausto nazi. Rechazamos toda forma que degrade la vida, honra y dignidad humana. Rechazamos el trato inhumano y despiadado así como las condiciones deplorables en las que están nuestros compatriotas y rechazamos toda forma de secuestro como mecanismo de presión.

Por esta razón, hacemos un llamado a Colombia entera, a todas sus organizaciones civiles, estamentos gubernamentales, partidos y movimientos políticos y a todo el pueblo colombiano para que exijamos la liberación rotunda e incondicional de todos los secuestrados. Colombianos unidos gritémosle a los violentos y particularmente a las FARC, que no más. Que no vamos a permitir que esta infamia e ignominia continué.

Convocamos al pueblo colombiano al grito de…

…Si a la liberación rotunda e incondicional de todos los secuestrados. No al peligroso negocio del intercambio humanitario.

lunes, 19 de noviembre de 2007

DERECHO DE PETICION POR UNA JUSTICIA EQUITATIVA

En días pasados llego a nuestro blog este comunicado que queremos compartir con ustedes, en donde se refleja claramente lo planteado en uno de nuestros artículos pasados: la justicia en nuestro país no funciona de manera equitativa para todos.

En momentos en los que el país recuerda los lamentables hechos de Palacio de Justicia, es preciso hacer una reflexión que permita construir un mejor país.
Por qué los colombianos no reaccionamos cuando las fuerzas legales del Estado son atacadas. Por qué ningún teórico, de esos que tanto suelen hablar en los medios, no pide que sean investigadas las muertes de militares. Es que acaso los militares no son colombianos y no deben ser protegidos siendo la justicia el elemento que permite a los Estados garantizar la igualdad.

Esta realidad hace que cada día nuestras Fuerzas Armadas estén a la deriva y desprotegidas judicialmente. Solo las denuncias de crímenes proferidas en contra del estamento militar son escuchadas, pero quién los escucha a ellos cuando son víctimas de los terroristas. La muerte de nuestros soldados es importante y por tanto debemos exigir justicia para ellos y para miles de colombianos que viven la misma situación.
No podemos seguir estigmatizando a la Fuerza Pública. Ellos son héroes que día a día sufren en silencio por las hostilidades y los atropellos a los que son sometidos y, aun así, siguen defendiendo lo que más aman, la patria.
No podemos seguir con una justicia ni decisiones políticas a medias que afecten a miles de colombianos, por los que nadie aboga ni nadie recuerda. Es nuestro deber unirnos para que ningún colombiano sea olvidado. Apoyemos a los secuestrados, los pobres y todos los colombianos desprotegidos por la actual situación del país.
La justicia es el estamento que nos garantiza una vida digna y mejor para todos, por lo que esperamos que su conducta y la de sus magistrados y jueces, sea la misma para todos los colombianos.

Bogotá, Noviembre 15 de 2007


Doctor
MARIO IGUARAN ARANA
Fiscal General de la Nación
La ciudad


ASUNTO: DERECHO DE PETICIÓN


Doctor Mario Iguarán:

Enterados por los medios de comunicación del día jueves 8 de noviembre de este año, sobre la reapertura de expedientes relacionados con asesinatos de personalidades de la vida nacional, organizaciones políticas y contra militantes de la Unión Patriótica en la década de los ochenta y que la Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía ya ha dictado órdenes de captura relacionadas con tales hechos, las Organizaciones de la Reserva Activa de la Fuerza Pública consideramos oportuno solicitar al Señor Fiscal que en el marco de los mismos derechos de quienes se consideran afectados, sean tenidas en cuenta las averiguaciones en igualdad de condiciones de los miembros de la Fuerza Pública que fueron asesinados y hasta la fecha se desconocen los resultados de las mismas, como es el caso de los siguientes señores oficiales asesinados vilmente, entre otros:

GR. FERNANDO LANDAZABAL REYES
MG. CARLOS JULIO GIL COLORADO
BG. VALDEMAR FRANKLYN QUINTERO
MG. SAULO GIL RAMÍREZ SENDOYA
BG. CRISPINIANO QUIIÑONES
CR. JAIME RAMÍREZ GOMEZ
CR. ROLANDO OSEJO ORDÓÑEZ
TC. ARMANDO RAMÍREZ RAMON

Igualmente nos gustaría conocer los nombres de las personas que han sido detenidas y/o condenadas como responsables de tales crímenes o que se hallen actualmente privadas de la libertad como consecuencia de dichas investigaciones.

Para asegurar que en cada uno de estos casos no haya impunidad, le solicitamos que se asigne una unidad especial a la de Derechos Humanos de la Fiscalía, para que en la mayor brevedad se reabran los expedientes y se lleven a feliz término las averiguaciones correspondientes.
Contiene firmas del Derecho de Petición de las Organizaciones de la Reserva Activa de la Fuerza Pública, de fecha 15 de noviembre del 2007 ante el Señor Fiscal de la Nación.

Para su información, esta petición está siendo entregada a los medios de comunicación y remitida al Ministerio del Interior y de Justicia, Ministerio de Defensa Nacional y a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

Del Señor Fiscal,

General RAFAEL SAMUDIO MOLINA
Presidente Asociación Colombiana de Oficiales en
Retiro de las Fuerzas Militares

Sargento Viceprimero JAIME QUINTERO OCAÑA
Presidente Confederación Colombiana de Organizaciones
del Personal en Retiro y Pensionados de las Fuerzas Militares
y de la Policía Nacional

Teniente Coronel. JOSE ALBERTO PEROZA ARTEAGA
Presidente Asociación Colombiana de
Oficiales en Retiro de la Policía Nacional

Brigadier General. ENRIQUE GALLEGO HERNÁNDEZ H.
Presidente Colegio de Generales en Retiro de la
Policía Nacional

Vicealmirante JOSE IGNACIO ROZO CARVAJAL
Presidente Cuerpo de Generales y Almirantes
en Retiro de las Fuerzas Militares

Brigadier General. GUSTAVO GOMEZ V.
Representante Unidades
Simbólicas del Ejército

jueves, 8 de noviembre de 2007

COMUNICADO PALACIO DE NARIÑO

COMUNICADO DE LA PRESIDENCIA DE LA REPUBLICA DE COLOMBIA
Noviembre 7 de 2007

1. El Gobierno Nacional rechaza las afirmaciones del Presidente de la Corte Suprema de Justicia contra las Fuerzas Militares de Colombia.

2. Es falso que el ataque terrorista del M-19 y de sus socios del narcotráfico al Palacio de Justicia, en 1985, sea comparable, ética y jurídicamente, con el esfuerzo de los militares por defender y liberar a los rehenes. Los primeros cometían un crimen de lesa humanidad; los oficiales y soldados cumplían con sus obligaciones constitucionales y legales.

3. Describir la acción de las Fuerzas Armadas en defensa de la institucionalidad como ilegal y violatoria de derechos fundamentales, es herir la dignidad de todo el Estado colombiano.

4. El Gobierno aconseja la mayor prudencia para que se evite el prejuzgamiento y la estigmatización colectiva de todos los participantes en una acción institucional para restablecer el orden, sin perjuicio de que se persiga individualmente a los autores de acciones irregulares o ilegales.


Colombia recuerda la tragedia que hace 22 años puso en jaque la institucionalidad del país. Finalmente, el Gobierno Nacional, defiende sus instituciones y los deberes constitucionales que ellas deben cumplir para garantizar la seguridad del Estado y sus ciudadanos.

A Las fuerzas militares las han intenteda pisotear y desprestigiar desconociendo que gracias a ellas hemos podido sobrevivir en el contexto actual. La soberanía del Estado, la defensa de los intereses de la mayoría, el mantenimiento del Estado social de derecho, la disminución de los grupos insurgentes guerrilleros y de autodefensas, son algunos de los logros que Colombia ha obtenido gracias a la labor de la Fuerza Pública.
¿Es justo que ahora se les calumnie cuando fueron ellos los encargados de devolverle a Colombia la tranquilidad institucional en noviembre de 1985?
Si son juzgados infamemente las Fuerzas Militares y de Policía por defender la democracia colombiana, no esperemos que más adelante sean ellos los que sigan poniendo el pecho por nosotros en el campo de batalla. Ellos merecen el apoyo de todo el pueblo colombiano, porque, en últimas, son ellos quienes defienden realmente al país en el conflicto que vivimos en la actualidad.

Son estos momentos en los que se requiere que todos los colombianos de bien nos unamos sin importar la ideología, el credo o la raza en defensa del Estado Colombiano. Ahora, debemos apoyar toda institución legal y constitucionalmente consagrada en nuestra Carta Magna.
¡¡¡Es el tiempo de unirnos y proteger nuestra soberanía en aras de la verdad!!!

Colombiano Pensante

jueves, 1 de noviembre de 2007

CARLOS GAVIRIA INCITA AL DELITO

El país pudo ver por fin la verdadera postura de Carlos Gaviria y del Polo Democrático frente al conflicto y a la guerrilla.
¿Qué clase de dirigentes son los que aspiran a llegar al poder?


La frase fue desagradable y mortal para las aspiraciones de un pueblo inmerso en una guerra de más de 50 años y que buscar alcanzar la paz. “Una cosa es matar para enriquecerse y otra cosa matar para que la gente viva mejor”[1] fueron las palabras del jefe del Polo cuando trato de argumentar su tesis sobre el delito político que sin duda apoya y justifica la actuación de los grupos guerrillero que invocan dicha tesis.

Las declaraciones de Carlos Gaviria tienen un efecto nefasto para la sociedad colombiana debido a la incitación e invitación que se hace para cometer asesinatos con el objeto de ganar una mejor vida. La gravedad de esta afirmación trasciende toda lógica ya que desde ningún punto de vista es comprensible que para progresar y mejorar mi status tenga que matar a alguien en legítima defensa de mi calidad de vida. ¿Pueden ustedes imaginar como seria una sociedad con este panorama?
Pues tendríamos una sociedad en donde la esposa podría matar al marido porque ella considere que haciéndolo le garantizara una mejor calidad de vida a su familia, o el compañero de trabajo haría lo propio con alguien que le pueda quitar su puesto. Incluso en temas políticos matar a un candidato para ganar el puesto sustentando que así obtengo un progreso en mi vida. Miles de ejemplos pueden pasar con una sociedad en donde el delito del asesinato sea justificado y valido como lo argumenta el jefe del Polo Democrático.

¿Qué clase de comentario es este? ¿Cómo es posible que la persona que dice defender la igualdad y la justicia diga que es valido matar en algunas circunstancias? ¿Cómo se va a negar ahora que esa postura es la misma que por años ha defendido la guerrilla y ha servido para cometer los más atroces crímenes contra el pueblo colombiano?

Por Dios señor Gaviria, Colombia no puede tener esa clase de dirigentes que buscan y creen en la ideología de las FARC. No podemos aceptar que una figura pública con un poder de injerencia social cometa y diga toda clase de bestialidades que atentan contra la dignidad, vida y honra de todas las personas que han sido victimas de los grupos guerrilleros y en últimas de todo el pueblo colombiano.
Qué pensara la familia de una persona asesinada por las FARC cuando un dirigente político defiende la actuación de los asesinos de su ser querido.

No creo que el Polo defienda la igualdad, la justicia ni muchos menos los intereses de la mayoría de colombianos. No podemos creerlo luego de escucharlo de su propia boca “Una cosa es matar para enriquecerse y otra cosa matar para que la gente viva mejor”
En qué país vivirá el señor Gaviria que cree que la guerrilla esta matando para vivir mejor. En qué país vivirá que desconoce que sobre esa tesis miles de inocentes compatriotas han muerto y muchos otros han sido desaparecidos.

Colombianos despertemos. No podemos permitir esta clase de comportamientos poco éticos y dañinos para el bienestar colectivo. El asesinato y las acciones de los bandidos y asesinos guerrilleros no tienen justificación y mucho menos se puede diferenciar entre el asesinato con un fin económico y otro de bienestar. No existe diferencia alguna entre estos dos ya que ambos son asesinos y como tal deben ser castigados. La vida, que es lo única verdaderamente nuestro, no puede ser el objeto de clasificación. La vida no se puede acabar justificadamente, la vida debe ser respetada y protegida porque la vida no hace parte de una discusión jurídica o una decisión política.

Elevemos nuestra voz de protesta en contra de todas las tesis que atenten contra el bienestar general. Critiquemos fuertemente la posición de señor Gaviria y del Polo Democrático que lo único que buscan es defender y apoyar las atrocidades de los vándalos de las FARC. ¿Esos son los dirigentes que merece nuestro país? Yo creo que no y no podemos aplaudir ni apoyar esa clase de ideologías.

[1] VER VIDEO EN http://www.semana.com/wf_InfoArticulo.aspx?idArt=107399.

viernes, 12 de octubre de 2007

RADIOGRAFÍA DE UNA JUSTICIA INJUSTA

Los medios lo comentan y los desprevenidos lo creemos. Pero más allá del supuesto acto delincuencial del Presidente, se esconde un mundo de engaños, intereses oscuros y mentiras. Al final el país es el que pierde.

Otra vez los engaños rodean las columnas de los diarios y los principales noticieros. Ahora resulta impactante ver como un delincuente que asesino a un sinnúmero de colombianos de bien, acusa al Presidente de la República de asesino. Y el tema no para en este punto, sino en la actuación de funcionarios de la rama judicial que con su “mal fe” atentaron en contra de la dignidad del país y sus ciudadanos, manipulando y acomodando la información sin ningún respeto por Colombia.

Los hechos ya conocidos y bien relacionados en la columna de Fernando Londoño (Ver link Articulos Destacados: Por el Honor de Colombia) muestra la cruda realidad de nuestros sistema de justicia y, lo más triste, es que nos deja ver la verdadera realidad colombiana; esa realidad de la que muchos estamos alejados y ajenos por la misma repulsión que nos produce.
Las prebendas y beneficios que le fueron o iban a ser otorgados a Tasmania por los mismísimos miembros de los altos tribunales de justicia y de la Fiscalía General de la Nación, demuestra una vez más que los intereses individuales manejan la política colombiana. Estos organismos no tuvieron repararos en armar todo este problema para dejar de lado las investigaciones que deben adelantar sobre la parapolítica ¿Qué esconderán ahora para que estén desviando la atención de país?

Ahora bien, el empleo de un bandido como Tasmania como “testigo clave” de un proceso por asesinato no es garantía para el nadie. No podemos seguir esperando que los delincuentes se conviertan en los “voceadores de la verdad colombiana”, a sabiendas que ellos cambian los hechos a su antojo y conveniencia. ¿Es creíble el testimonio de alguien que no tiene nada que perder y sí mucho que ganar quien al decir una mentira e implicar a inocentes le pueden rebajar su condena o dar prebendas y beneficios? ¿Si me condenaran a 40 años por algún delito, que pierdo yo diciendo mentiras que pueden convertirse en verdades para rebajar mí pena?

Este vil engaño y manipulación de esos delincuentes y funcionarios públicos atenta a diario no solo en contra de funcionarios del Estado, sino también en contra de miembros de las Fuerzas Militares (tantas veces implicados en hechos falsos y deshonrosos para la institución) y en muchas otras ocasiones contra ciudadanos inocentes.
Frente a este escenario queda claro que nuestro sistema de justica está plagado de fiscales y jueces que buscan protagonismo y popularidad constituyéndose en “sicarios morales” que destruyen la honra, dignidad y buen nombre de las personas, algo por lo que siempre luchara Evolución Colombia.

La lección de vida en este caso va también para el Presidente Uribe quien ha callado cuando miembros de la Fuerza Pública y varios ciudadanos se han visto involucrados en el mismo juego de deshonra y mentiras siendo inocentes. Ahora cuando es él quien está siendo víctima de los chantajes sí exige justicia y reacciona con vehemencia. ¿Cuál es principio de equidad y justicia que se maneja en nuestro país? Aprende Uribe de las lecciones de la vida y las señales del cielo, aprende. “No hagas a los demás lo que no te gustaría que te hicieran”

¿Qué va a pasar ahora con este escándalo? Pues que la Fiscalía y la Corte Suprema dirán que el testimonio de Tasmania no es válido por ser un bandido, porque ahora son ellos los que están bajo la crítica del pueblo colombiano. Ahora ellos saben que todas las miradas están puestas sobre ellos y sobre su mala fe y proceder.
La ironía de esta historia se ve también reflejada en la falta de igualdad en el trato de testigos. Si el acusado fuera algún militar o algún ciudadano de bien, un bandido Tasmania sería el “testigo estrella y clave” de la investigación, pero ahora cuando se tocan otros intereses es simplemente “un delincuente que da una versión errónea”. Que justicia más injusta: que radiografía más exacta de nuestro sistema judicial. ¿Hasta cuándo Dios mío, hasta cuándo?

Ojala todos los colombianos sintiéramos confianza y seguridad en nuestro sistema de justicia. Ojala tuviéramos la posibilidad de exigir justicia como lo hace el Presidente, pero desafortunadamente estamos indefensos en esta inmensidad de poder y mentira. La única opción unirnos y construir un grupo significativos de ciudadanos que vele por nuestros derechos. COLOMBIANOS ESTEMOS ALERTA somos ciudadanos desprotegidos e indefensos en un mundo de información mentirosa. Solo reproduciendo este tipo de mensajes lograremos salir de tantas cortinas de humo y distorsiones que a diario vemos y leemos.

lunes, 8 de octubre de 2007

QUE VERGUENZA!!!

Por Rocío Vélez de Piedrahíta
rociove@hotmail.co
El Colombiano, Medellin
6 de octubre de 2007

En la villa de Beodez todo, todo es al revés/ El ratón corre al gato, y el ladrón condena al juez".

El ex presidente Belisario Betancur ha sido llamado ¡una vez más! a declarar sobre los sucesos del Palacio de Justicia. Los colombianos que en 1986 eran adolescentes, no tienen idea de la situación que había en el país, los fines que buscaba ese tenebroso ataque, y creen a pie juntillas cuanto dicen los medios para impactar, los interesados en cuestionar la legalidad de los gobiernos, los beneficiados con ríos revueltos. No sobra volver sobre algunos aspectos que, inexplicablemente, parecen olvidados. Lo indiscutible fue que el grupo guerrillero M-19 atacó el Palacio de Justicia con armamento abundante y sofisticado y pertrechos suficientes para permanecer en el edificio muchos días. Entre las muchas personas que interrogué para escribir
El diálogo y la paz (mi perspectiva), no encontré una sola que el 7 de noviembre no tuviera la convicción absoluta de que las Fuerzas Armadas tenían que recuperar el Palacio y que habían salvado la patria. Fue un hecho transmitido por televisión y corroborado por testigos presenciales, que cuando las tropas desfilaron por las calles al final de la retoma del Palacio, fueron aplaudidas por la gente. A la calle no salen a aplaudir o protestar los estratos 5 y 6; esos aplausos ponían de manifiesto un sentimiento popular de que el Ejército había salvado el país. El 8 de noviembre, la prensa, -conservo ejemplares y puede consultarse en los archivos- y la TV presentaban como aspecto positivo, fundamental, que el Presidente se hubiera mantenido firme, y la necesidad de rodear al mandatario de un apoyo masivo.

El Tiempo expresó en su editorial "Aproveche el momento, señor presidente": "El presidente seguramente recibe el respaldo absoluto que tiene la manera como se ha negado a negociar con los enloquecidos terroristas del M 19...". Enviaron su apoyo, total, al presidente: los presidentes de Senado y Cámara, la Iglesia, Andi, Fenalco, Acopi, Augura, Fedemetal, Universidad de Medellín, Bolsa de Medellín.

El Colombiano, El Mundo, Fadegán, Colegio de Abogados de Medellín, Encuentro de Antioquia, Sociedad Antioqueña de Arquitectos, Empresas Públicas de Medellín, y muchos más. Virgilio Barco pidió además de respaldo al Presidente, apoyo para las Fuerzas Armadas. A partir del 17 de noviembre empieza el aprovechamiento político de la tragedia. El senador César Gaviria Trujillo, entonces totalmente desconocido para el país, se convierte en el abanderado de un ataque frontal al presidente Betancur, con empeño en lograr por medios políticos el mismo fin que perseguía el M-19 a base de terror: ¡un juicio al Presidente! En el programa La Noche del miércoles 3 del presente, el doctor Jaime Castro explicó que hacia las 2 de la tarde, cuando el Presidente conoció el manifiesto preparado por el M-19 para cuando obtuvieran la victoria, comprendió que no se trataba de un asalto guerrillero, sino de un golpe de Estado, que lo que estaba en juego era la Patria, en toda la dimensión de la palabra, y, solo entonces, decidió que no podía negociar.

Tengo un ejemplar de ese manifiesto el cual no deja ninguna duda de que se trataba de un golpe para derrocar al gobierno, seguirle un juicio al Presidente con los magistrados como rehenes testigos. "Estamos aquí... para convocar a un juicio público contra el gobierno del presidente Belisario Betancur...". El doctor Carlos Lleras Restrepo en el editorial de Nueva Frontera -noviembre 18- calificó el manifiesto y sus propósitos de 'inauditos', la prensa publicó pero la gente o no lo leyó, o no creyó, o lo olvidó.Los jóvenes de hoy, con elegantes ex Emes 19 en el Congreso, no comprenden que no se trataba de ovejas descarriadas que el buen pastor debe buscar con amor para volverlas al redil donde seguirán una vida de paz, sino de unos lobos hambrientos de poder, iracundos frente a las leyes que pretendían controlarlos, que no podían ser sometidos con diálogos en el fragor de un combate, en medio de las llamas, sino con algo muy doloroso, atroz, pero inevitable: con una fuerza mayor a la del agresor.

Esta nueva citación al ex presidente es una vergüenza para nuestra justicia, porque es la undécima vez que se presenta a declarar y siempre, siempre, ha sido absuelto; entonces ¿es que los jueces no saben juzgar? ¿Para qué los veredictos si nunca, nada, es cosa juzgada? ( Ya habrá otra oportunidad para comentar lo que se siente al ver a los Petros en el Congreso y saber que una y otra vez se enjuician los generales que ese día, sin duda, salvaron al país).

viernes, 5 de octubre de 2007

EL PALACIO DE LOS RECUERDOS

EDITORIAL DE EL TIEMPO SOBRE EL PALACIO DE JUSTICIA
Abril 27 de 1987


¿Otra Más?

El ex presidente Belisario Betancur vuelve a ser citado para aclarar su posición durante los cruentos y espantables acontecimientos del levantamiento patrocinado por el M- 19 contra la democracia colombiana, al asaltar el Palacio de Justicia y provocar con su acción el más horrendo crimen de estos últimos años.
El mandatario, con su actuación decidida, clara y firme cumplió con el sagrado deber de sofocar el motín y poner a salvo las instituciones patrias. Siguió al pie de la letra lo que la Constitución ordena, dejar al libre arbitrio del jefe del Estado la mejor manera de resolver crisis como esa. Mucho se ha escrito al respecto. Al presidente Betancur lo respaldaron los ex presidentes de la República, lo más destacados jefes políticos y, lo que es de mayor importancia, la inmensa mayoría de la opinión pública. Como nunca, Belisario Betancur sintió al pueblo a su lado. A la nación entera sin distingos políticos, sociales o raciales: claro está, con escasas y bien conocidas excepciones.
Fue su hora de gloria y de espíritu republicano. Tal vez el mejor momento de su gestión presidencial. En esa dura jornada estuvimos a su lado, como lo estamos ahora. Nos preocupa el porqué se revive esa álgida cuestión, por que se intenta promover un nuevo juicio. A Belisario Betancur lo han absuelto ya los estamentos jurídicos y, lo que es más importante, la nación. Nos tememos que toda esta intentona lleve en el fondo, más que una razón jurídica, otra de carácter político y desgraciadamente con su sentido extremista. Es verdad que los investigadores de la conducta presidencial pertenecen a los dos partidos, pero en el fondo el debate se va a centrar, lo presentimos, contra la actitud del presidente como comandante supremos de las Fuerzas Armadas, y los altos militares que dirigieron la operación.
Todo ello responde a una táctica bien conocida, mejor promovida y de consecuencias fáciles de prever. Otra vez se mostrará al establecimiento como la representación de una represión brutal. Para terminar diluyendo la responsabilidad de quienes son los verdaderos responsables de esa hecatombe: el M-19 y el narcotráfico.
Cuando necesitamos de una mayor solidaridad entre los dirigentes, de un espíritu político tranquilo y conviviente, se “revive el avispero”. Nada más peligroso que retrotraer en forma Permanente las cosas juzgadas, sin que para ello existan nuevas causas que puedan cambiar los hechos ya fallados. Bastantes motivos de controversia política y social tenemos. Agregar otro, como este absurdo juicio al ex presidente Betancur, está de más. El ex mandatario admite y cumple su deber al aceptar cualquier investigación. Estamos a su lado. Lo apoyamos, lo respaldamos, dejando de lado razones partidistas para pensar tan solo como su desempeño, en esa hora nefasta, estuvo acorde con las mejores conveniencias para la salud pública. El fallo de la historia ya esta dado, los demás sobran.

miércoles, 3 de octubre de 2007

NACE UNA NUEVA FORMA DE PENSAR

Colombia adolece de espacios serios y criticos que puedan mostrarles a los ciudadanos una vision mas seria y comprometida sobre el manejo de la informacion publica en el pais. Es evidente que dicha informacion, es hoy por hoy, el elemento de poder mas significativo. Debido a esto, su manejo debe ser valorado y analizado para evitar que unos pocos se aprovechen de la mayoria que ve en ellos los unicos conocedores de "la verdad".
Evolucion Colombia es ese espacio que Colombia necesitaba para interpretar los hechos que a diaro tenemos y que muchas veces nos confunden.
Colombia cuenta con gente interesada en aportar y querer a su pais y nosotros, como grupo de ciudadanos de bien, comprometidos con la nacion y constructores de opinion, queremos aportarle a nuestro gran pais dando nuestra opinion sobre los acontecimientos trasncendentales del Estado Colombiano. Buscamos ser un generador de criterio público que enriquezca el debate político, social económico y cultural que a diario existe en el pais.
Nuestra mision siempre se desarrollara cumpliendo con los valores de responsabilidad, pluralidad y participacion ciudadana que nos caracterizan.
Esperamos que a diaro nuestro proposito se cumpla, para mostrar a los colombianos que existe una nueva forma de comunicacion seria, responsable, coherente y que respeta la dignidad, honra y honor de los ciudadanos. Esta nueva forma de interpretar la realidad nacional hará espiritus mas criticos y propositivos.
EVOLUCION COLOMBIA es el espacio para participar y construir pais. Contamos con su apoyo.